martes, 17 de diciembre de 2013

oh, en el ojo
del huracán
hay calma silencio
y tu voz
cada vez
más lejos

y yo acá
girando
girando
y a la vez
centrada
y en paz

oh, este huracán
de amor y risas
me da vueltas
me lleva
me trae
de vuelta a mí

habrá que ver
qué queda
cuando pase
la tormenta
qué semillas
encontraron su lugar

de qué adioses
fuimos capaces
qué besos dimos
qué tristezas
qué miedos
dejamos ir

martes, 10 de diciembre de 2013

Querido Rey de la Cabina:
¿por qué llamamos amor al amor?
con lo que cuesta, con lo que duele,
con lo que tarda, con lo que arde,
con lo que falta, con lo que quema,
con lo que ausencia, con lo que tiene,
con lo que viene, con lo que ahueca,
con lo que silencia, con lo canta,
con lo que arrulla, con lo que leche,
con lo que vibra, con lo que abraza,
con lo que olvida, con lo que vida,
con lo que pajarito, pajarito,
caracolito tan poco mío y de nadie.
Yo, que nunca te tendré.
Y aunque no te lleguen mis correos
te escribo,
y aunque no sepa si los lees,
te escribo.
Te escribía.
Ciega de ausencia de no verte,
ciega al resto de tu hueco en el mundo.
Harta de abrazar calaveras de tu presencia
siento el aire que alimenta mis pulmones,
respiro al imaginar que volvería a tenerte
enfrente mío, doblando tu ropa y los jazmines,
apoyando los azahares de tu frente.
Aunque falten siglos para tanto verano,
y hoy sólo tenga para ofrecerte
un otoño lleno de hojas que se retiran
regalando su turno a lo inventado.
Quiero regresar
sólo para lo imprevisto,
para lo que deba nacer de tus manos y las mías.
Para nada que ya haya sido escrito o dibujado.
Ni en tu alma, ni en la mía.
Paloma

-cartas al rey de la cabina, luis pescetti-
tengo frío
y miedo y angustia
un susto que
no se va
entonces vuelvo
a vos a ese abrazo
en la puerta ésa
que nos sostuvo
mientras la calle
gritaba y se reía
nos abrazamos
y charlamos
un rato largo,
quedando en suspenso
en el abrazo
como si lo mismo
diera la cercanía
que estar a
prudente distancia
(quizás para vos
así fuera)

tengo frío y
estás lejos
a mil años luz
(más tu corazón
que tu cuerpo)
lejos de mí

y de repente
me doy cuenta:
el frío es más ahora
ahora que sé
que la puerta
que imaginé
entornadita
se cerró del todo
ahora hay más frío
y menos esperanza
pero (sin embargo)
hay tu abrazo,
hay ese día
y hay (ay!) la sonrisa aquella

tengo frío pero ahora
que te recuerdo
y te escribo y te traigo
se entibian -un poquito-
la casa y mis pies

magia de las palabras
que te traen sin traerte
que me dicen sin decir
que cambian algo
aunque todo siga igual

sábado, 7 de diciembre de 2013




-y un día me di cuenta
que mostrar mi oscuridad
es lo que me hace luminosa-